LA VUELTA AL COLE Y A LA GUARDE, 10 consejos motivacionales.

ADAPTÉMONOS TODOS AL NUEVO HORARIO. Una semana antes de la vuelta conviene ir adaptando el horario de los niños en cuanto al momento de irse a dormir ya las distintas comidas.

ENTUSIASMO Y TRANQUILIDAD. Es muy importante que los padres muestren su tranquilidad y eviten comentarios negativos. El estado de ánimo de los padres se contagia fácilmente a sus hijos. Ya se que esta tarea no es nada fácil, pero también os va venir muy bien a vosotros, algo positivo siempre hay;)

INVOLUCRARLOS EN LA PREPARACIÓN DEL MATERIAL. Para que los niños vayan concienciandose del inminente comienzo del colegio, conviene hacerlos partícipes de la preparación del material escolar y de sus cositas en caso de la vuelta a la guardería, ayudales a elegir su peluche preferido para la guarde, el biberón o taza que más le guste, etc..Y recordar que debemos personalizar todo el material para evitar pérdidas y frustraciones por ellas. Hay etiquetas identificativas tanto para ropa o para objetos que ya vienen con el nombre y son muy fáciles de colocar, además de divertidas para ellos. Podéis escogerlas juntos y que os ayuden a pegarlas, esto les encanta, además en caso de los más pequeños, les ayuda a reconocer su nombre.

QUEDAR CON OTROS COMPAÑEROS DE COLEGIO. Días antes del inicio del curso será muy positivo para el niño quedará con compañeros para ir recuperando juegos comunes y así favorecer su adaptación.

DESPEDIDAS BREVES Y SIN DRAMAS. Cuando el niño acuda a la guardería o colegio debe notar la seguridad de sus padres; por ello, la despedida en el centro escolar debe ser breve y sin dramas, aunque el pequeño se quede llorando. En caso de la guardería, siempre hay un periodo de adaptación que os lo va hacer mucho más fácil, recuerda que eres tú el que le tienes que transmitir la máxima seguridad a tu peque, aunque estés triste por dentro, controla las emociones, además recuerda que tendrás algún ratito libre para ti y esto siempre es positivo.

CUIDAR LA ALIMENTACIÓN Y EL DESAYUNO. El desayuno va a proporcionar la energía necesaria que precisa el niño para afrontar la jornada escolar. Si es insuficiente (o peor aún, si el niño no desayuna), puede sentirse decaído, abatido, no concentrarse bien ... Por ello, hay que cuidar que la alimentación sea equilibrada durante todo el día. Si tu peque aún es lactante, te recomiendo que hagas un pequeño almacenaje con tu leche para al menos tener los primeros días y no estar tan agobiada y si no has empezado a darle biberón no esperes a que empiece la guarde, hazlo un poco antes en casa para que se vaya acostumbrando.

FACILITAR LA ADAPTACIÓN. Cuando el pequeño se incorpora a la vida escolar por primera vez su vida sufre un cambio drástico. Por este motivo conviene seguir al pie de la letra las pautas de adaptación que marque el centro educativo.

PROMOVER QUE EXPRESE SUS SENTIMIENTOS. El niño puede sentirse perdido, nervioso, preocupado ... ante alguna circunstancia del colegio. Hay que favorecer, pues, que pueda expresar con libertad sus pensamientos y sentimientos. Ten paciencia, escúchale y sobre todo no le regañes si llora, se le irá pasando.

BUENA SINTONÍA PADRES-COLEGIO. La sintonía entre los padres y el colegio (incluidos los profesores) debe ser total para que el niño goce de la tranquilidad que necesita para afrontar con garantías el curso escolar. Tienes que tener confianza y seguridad con el personal del centro, es básico.

LA IMPORTANCIA DEL PRIMER DÍA. El niño se sentirá mucho más seguro si va acompañado de sus padres el primer día de clase. En la medida en que esto sea posible, él debe tener la tranquilidad de que ese día no va a ir solo al colegio y que sus padres estarán ahí para ayudar con su inquietud y sus miedos. En esa primera jornada es fundamental que todo se haga con calma y sin prisas para no añadir más estrés al reencuentro escolar.